jueves, 28 de enero de 2010
Noticias sobre "Harina de otro costal"
"Cinco y acción", dice el coordinador de estudio y todo se llena de silencio. A nadie se le ocurre hablar, a menos que sea uno de los actores que intervienen en la escena.
Tocan una puerta con desesperación, la muchacha de la casa la abre. "¿Qué haces aquí?", pregunta Valentina. "Sólo quería verte", responde Víctor. Y así arranca una de las tantas grabaciones de Harina de otro costal, la nueva telenovela de Mónica Montañés, protagonizada por Daniela Bascopé y Christian McGaffney.
Venevisión aún no ha anunciado la fecha de estreno de su nuevo teleseriado, pero sin embargo, las grabaciones de esa producción dramática, que se realizan en un estudio del Centro Comercial Los Cedros, van a millón.
Por lo menos se realizan de 15 a 18 escenas diarias, que transcurren, en los decorados que simulan el hogar de la familia Fernández, el apartamento de los Hernández, una peluquería old fashion y una barbería.
Y la grabación continúa. Valentina (Bascopé) y Víctor (MCgaffney) discuten acaloradamente. Ella cree que su enamorado estuvo relacionado en un accidente de tránsito que tiene a su hermano hospitalizado y el galán le jura que no tiene nada que ver. Pero ella lo bota su casa, y al cerrar la puerta, llora desconsolada.
De pronto, alguien dice: "¡Qué buena!". Es la actriz Mariaca Semprún, que felicita a Daniela Bascopé. La protagonista, se limpia las lágrimas y sigue como si nada hubiera pasado.
"Daniela, yo creo que podemos grabar de una (vez) la otra ¿La hacemos?", pregunta el director Carlos Izquierdo, quien no se ve porque está en la cabina de dirección pero que sí se escucha en el estudio gracias a los micrófonos. "Sí, de one", responde la actriz.
Cerca de ellos, Marisol Matheus repite constantemente: "Yo no me voy a ir en delantal para la clínica", y pide que se revise la secuencia de las escenas para no tener un error de vestuario ante las cámaras.
Y es que la telenovela de Mónica Montañés -inspirada en Romeo y Julieta- habla de dos familias rivales por su profesión: unos son pasteleros y los otros son pasteleros. Pero en el fondo son tan parecidos que inclusive viven en el mismo edificio de ficción y sus apartamentos son separados sólo por una pared. Igual que en el mismo estudio de grabaciones.
Del lado izquierdo está la casa de los Fernández: Carmencita (Mayra Alejandra), Aniceto (Basilio Álvarez) y su hija Valentina (Daniela Bascopé). Del lado derecho está el apartamento de la familia Hernández: Plutarco (Carlos Mata), Maigualida (Mimí Lazo) y su hijo Víctor (Chistian McGaffney).
Y aunque los espacios ocupan las mismas medidas en la entrada, sala y cocina, se sienten las diferencias en la decoración.
"La casa de Carmencita es más cálida. La familia tiene 20 años con la misma señora de servicio y eso se nota. En cambio la casa de Maigualida es sensual, más fría, y es que a ella las personas que la ayudan con la limpieza no le duran nada", cuenta Clelly Arévalo, directora de arte de la telenovela, quien también explica que luego de un estudio de los personajes, se presenta una propuesta a la escritora y una vez aprobada, se empieza a montar la escenografía.
Un proceso que en esta ocasión tardó tres meses aproximadamente.
Son 683 metros cuadrados y seis metros de altura son las medidas totales de ese estudio de Venevisión. En las dos cocinas armadas allí, frutas y vegetales verdaderos, no de utilería. Berenjenas, manzanas, peras, plátanos y hasta pepinos se pueden encontrar ahí. Ni hablar del refrescante olor a parchita que se siente al abrir la nevera de Carmencita. La panadería y la pastelería, donde se desarrollarán otras tramas de la telenovela, están siendo construidas en otro estudio. Y se calcula que están listas para mediados de febrero.
Fuente: El Universal
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario